En el PRI no acaban de entender que, si quieren volver a crecer, es necesario que hagan un ejercicio de autocrítica, que saquen a los vividores del partido y renueven a sus dirigentes con nuevos militantes.
Requieren hacer una revisión a fondo el por qué la gente dejó de apoyarlos, en Tamaulipas llevan más de tres o cuatro sexenios que sus pronunciamientos, demandas y cuestionamientos a los gobiernos del PAN y MORENA no provocan el menor interés de los ciudadanos.
Sus mensajes ya no atraen a los electores y a veces hasta parece que apoyan a sus adversarios. Sin embargo, tenemos que reconocer que en la exigencia del Trasvase al distrito O26, el diputado Edgar Melhem se la ha rifado y aunque no pasará nada, es importante destacar que una golondrina no hace verano.
Comentamos esto porque ha trascendido que Paloma Guillén Vicente será confirmada como delegada del CEN del PRI en el estado, pero asumirá la presidencia del PRI estatal a partir del próximo 15 de diciembre cuando termine el periodo de la actual dirigencia en Tamaulipas.
Esta noticia es muy importante para quienes participan en el PRI del estado, ya que Paloma siendo una de las militantes con más trayectoria (casi 40 años) y sigue muy activa cuando en el escenario hay otros priistas que pudieran ocupar la dirigencia estatal.
Desde luego en el PRI de Tamaulipas no entienden que deben renovarse para mantenerlo vivo porque, así como van, pronto van a desaparecer en la entidad si continúan manteniendo en sus filas a los mismos que lo han hecho perder.
Para muchos comentaristas de la política, el PRI está muerto, pero para otros que aún añoran su presencia dicen que sigue coleando y no acaba de dar su último suspiro. Así que esperan que, en esta próxima elección de 2024, puedan ganar más distritos y municipios para seguir vigentes.
Por supuesto que esto será muy difícil que lo hagan y no es porque las elecciones se han complicado más, no. Es porque cuando los ricos del pueblo, los fifís y ñoños se adueñaron del tricolor, este partido empezó a fracasar y se alejó con una mayor rapidez de las clases populares, de la gente del Pueblo y para muchos ex priistas eso parecía que era su objetivo.
En fin, desde el sexenio de Tomás Yarrington hasta el de Egidio Torre Cantú el priismo empezó a perder en las elecciones, pero ni así lo entendieron sus dirigentes quienes a pesar de esta crisis empezaron a compartir las candidaturas con sus amigos, amantes, cómplices y empresarios, y muchos de esos personajes nada tenían que hacer en la política.
El caso es que ahora con la llegada de Paloma Guillén Vicente al PRI estatal, esto pudiera cambiar, pero serán los militantes y sus simpatizantes quienes deberán prepararse para quedarse o irse del tricolor, porque cómo se puede ver siguen los mismos de siempre y esto ya no va a cambiar. ¿Verdad?
De salida. Se informa que Lucía Aimé anda en precampaña y las escuelas en Tamaulipas siguen con múltiples problemas por la «Transformación» que hizo López Obrador al permitir que los maestros controlen los recursos dedicados al mejoramiento de las instalaciones escolares.
Y es que eso de manejar el dinero de las Asociaciones de Padres de Familia está causando muchos problemas, el caso de la escuela «Juan Camacho» de Altamira es un ejemplo, aunque ahí, las madres de familia ya están pidiendo la destitución de la Directora Yunen Vidales Herbet.
Aseguran que tiene antecedentes de malos manejos y las autoridades del CREDE no la ponen en orden. En este caso exigen la destitución de la directora, pero Lucía Aimé anda en precampaña y este tipo de asuntos no la pueden distraer.
Asimismo, los padres de familia de la secundaria técnica 54 de Ciudad Victoria hicieron un paro de labores y los 600 alumnos que tiene este plantel se quedaron sin clases la semana pasada.
En un hecho inusitado ya que fueron los mismos padres de familia quienes impidieron su entrada a la escuela para protestar, y es que en esta secundaria hay 10 maestros que no dan clases y el personal de intendencia no realiza su trabajo.
Lo que quieren los padres de familia es hablar directamente con Lucía Aimé o con el gobernador Américo Villarreal Anaya para resolver esta situación, ya que esto es frecuente y quieren que ya no suceda, están cansados de denunciar estos hechos y nadie les pone atención… que tal, eh.
En fin, lo peor del caso es que la Sección 30 del SNTE lo señaló, pero como se puede ver, siguen los problemas, los paros, pero ahora son los padres de familia quienes los hacen y todo sigue igual o peor.