*** Robos, asaltos, y hasta asesinatos padecen vecinos de dicho sector ante la nula presencia de las autoridades
Por: Martín DE LUNA.
ALTAMIRA, TAM.- A merced de los delincuentes se encuentran los habitantes del fraccionamiento Unidos Avanzamos y colonias vecinas, ante la nula presencia de la Policía Estatal Acreditable, asaltos a transeúntes, robo a casas habitación, robo de la ropa de los tendederos y hasta asesinatos tienen que sufrir los residentes de este fraccionamiento.
El más reciente reporte fue este domingo cuando una joven se convirtió en una heroína al resguardarse ella junto a su hijo, mientras unos ladrones prácticamente vaciaban su casa a plena luz del día, lo más grave es que la policía nunca llegó.
Los hechos sucedieron en la avenida Las Torres del fraccionamiento Unidos Avanzamos, uno de los más peligrosos del municipio de Altamira, cuando una jovencita de 18 años estaba sola en la vivienda cuidando a su hijo de año y medio.
Ella observó cuando los sujetos estaban intentando ingresar al domicilio, al parecer creyeron que no había nadie, sin embargo la mujer al conocer lo peligroso que son los delincuentes de la colonia, en lugar de hacerles frente tomó a su hijo en los brazos y se fue a esconder a una recámara.
Con mucha fe pidió a Dios que estuvieran a salvo y aunque los ladrones revolvieron toda la casa no se dieron cuenta de la presencia de la jovencita y de su hijo, aunque por momentos tuvo que taparle la boca para evitar que hiciera ruido.
Los delincuentes tras buscar por toda la casa lograron apoderarse de una pantalla de 32 pulgadas, una bocina grande y dos tablets, éstas servían para que los hermanos de la muchacha pudieran tomar clases en línea.
Cuando la madre de la joven llegó al lugar decidió llamar al 911 para pedir que llegara la policía, sin embargo esto no pasó, lo que es muy recurrente, pues la patrulla casi no ingresa al sector, dejando a los vecinos en total indefensión.
No es la primera vez que los ladrones ingresan a robar esa casa, pues hace seis meses igual se llevaron varias cosas, así que los propietarios no saben qué hacer, pues viven en condiciones muy modestas, pues el jefe de la familia es pepenador.